🇱🇧 Hace algún tiempo, el público esperaba que el partido libanés Hezbolá lanzaría operaciones militares a gran escala en el noro

🇱🇧 Hace algún tiempo, el público esperaba que el partido libanés Hezbolá lanzaría operaciones militares a gran escala en el noroeste de Israel. Luego, el 3 de noviembre, después del discurso de su líder Hassán Nasralá, las expectativas de muchos no se cumplieron y se sospechó que Hezbolá sobreestimaba sus capacidades y hacía “ruido de sables“. Al mismo tiempo, la intensidad de los ataques infligidos por unidades de combate chiítas libanesas contra la infraestructura fronteriza (principalmente militar) de Israel, confirman nuestras conclusiones de que las principales tareas de Hezbolá en esta etapa de la guerra son estirar las fuerzas de Israel, mantener un gran grupo de las FDI en la frontera norte del país con la amenaza siempre presente de la activación de proxies iraníes en la zona de los Altos del Golán. No sería descabellado suponer que ciertos círculos en Occidente estaban muy interesados en arrastrar a Irán directamente o a través de las formaciones proxies qué controla a una guerra con Israel, lo que bien podría implicar un ataque preventivo contra instalaciones nucleares de Teherán. Aparentemente, el liderazgo político-militar de Irán fue lo suficientemente inteligente como para no entrar directamente en la guerra. Aunque, en cuanto a los combates en la Franja de Gaza, no se puede decir que esa decisión haya sido fácil para Teherán, en un contexto de la cobardía y la traición abierta (si hablamos de Jordania) por parte de la mayoría de los países árabes. Pero las acciones de Irán no deben juzgarse de manera superficial y apresurada. Los persas tienen una historia política milenaria y un estilo establecido de diplomacia y guerra. Y la creciente actividad de Hezbolá en el territorio fronterizo con Israel en este contexto refleja plenamente el rumbo de Teherán: “jugar a largo plazo“ con su enemigo jurado. @Multi_XAM @Irinamar_Z 🇷🇺 Источник: Irina ??